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1. Cápsula con doble dispensador, construido preferentemente en material plástico y diseñado para formar parte conjunta o inseparable de las cápsulas de las que constan los contenedores de aceites domésticos, siendo de tamaño variable en función del dimensionamiento de las cápsulas ya existentes en el estado de la técnica habituales. Comprende: Dos dispensadores, uno de abertura superficial cilíndrica mayor (3) y el otro de abertura cilíndrica menor, (4) unidos en un solo bloque con el sistema estructural de las cápsulas tradicionales posicionándose ambos en la línea diametral y en lados opuestos del conducto circular que conforma la embocadura del envase. Y se sitúan prolongándose ambos en alturas idénticas respecto al nivel máximo de dicha embocadura. Resulta obvio añadir que los conductos cilíndricos de ambos dispensadores se comunican con el interior de los envases y, claro está, con el fluido. El dispensador mayor (3) abarca o comprende aproximadamente la mitad del círculo que forma la embocadura de vertido y cuyo centro semicircular de este dispensador mantiene la posición mencionada respecto a la línea imaginaria que pasa por el centro del círculo. En la pared circular de su interior (2) van unidas por sus bases 8 ó 10 pequeñas lengüetas rectangulares o piramidales de unos 7 ó 9 mm de longitud y de unos 4 ó 6 mm de anchura, cuyos centros longitudinales van dirigidos hacia el centro circular del dispensador. Ambos dispensadores se cubren, se abren o se cierran con sus tapas respectivas que mantienen diseños semicirculares (3 y 4 de Fig. 1) que van unidas a la estructura fija de la cápsula mediante bisagras integrales, (1) dispuestas de forma paralela, cuyos ejes de oscilación están situados en la parte externa de su superficie superior y están dotados de una formación semicilíndrica cuyas aristas limitativas tienen una proyección ortogonalmente al plano de las tapas. El dispensador menor, se sitúa cerca del extremo contrario al centro semicircular del dispensador mayor. Comprende un pequeño cilindro levantado o prolongado sobre la estructura fija de las cápsulas tradicionales manteniendo la misma altura que el dispensador mayor, cuyo círculo interior del dispensador menor es de entre 3 y 5 mm de diámetro para así limitar la salida del fluido envasado. Las tapas de ambos dispensadores se abren o se levantan al colocar la uña del usuario en una pequeña cuña cóncava (7) situada en la parte superior de la estructura fija y en línea perpendicular a los centros longitudinales de las bisagras. El sistema de cierre o de bloqueo (5) consiste en un anillo convexo en el interior de los conductos de los dispensadores y otro anillo cóncavo en el cilindro que va unido a las tapas en su zona interna posicionados en orden a la posición de los ejes de los dispensadores. Y los cierres se realizan al acoplarse y presionar ligeramente la tapa con el anillo externo con el anillo interno de los conductos de los dispensadores. |
